El Nyhavn Aplique fue diseñado por Alfred Homann y Ole V. Kjær en 1976. El Nyhavn Aplique fue galardonado en un concurso organizado por Louis Poulsen sobre la iluminación de zonas urbanas antiguas o de valor patrimonial. Antes del concurso, Alfred Homann había estado trabajando en diferentes bocetos y modelos. Gracias a ello, él y su compañero Ole V. Kjær pudieron presentar el material necesario en tan solo cinco días. Alfred Homann explica la idea detrás de este aplique: “Era importante que la luminaria fuera más pequeña y discreta que los otros productos disponibles en el mercado de la época”. La luz se caracteriza por una pantalla cónica y tres anillos antideslumbrantes que proyectan una suave luz hacia arriba.